12 febrero 2014

El anteproyecto de ley del aborto sigue su rumbo

No voy a defender o atacar el aborto. De eso ya hay mucho. Sólo voy a reflexionar sobre lo que significaría la aprobación del actual anteproyecto de ley en términos prácticos.

Para empezar, no estamos en los años setenta. Las madres solteras ya no son perseguidas, sino ayudadas. Incluso se ofrece apoyo sicológico a las que quieren dar el hijo en adopción. Tenemos píldoras anticonceptivas, píldoras del día después, condones en las esquinas (en muchas gratis), etc. En resumen, la mujer que pide un aborto en el 2014 no busca deshacerse del producto de una mala decisión. ¿Por que tanto revuelo, si el único motivo que nos queda es el médico o la violación y esos los protege el anteproyecto de ley?

Pongamos que tu mujer o tu hija o tu hermana queda embarazada del hombre de su vida. Empiezan los planes, las compras, las opiniones sobre el nombre. Vais a la ecografía de la semana 18-20, esa en la que descubres si va a ser niño o niña. Es entonces cuando os dicen que el cerebro del pequeño es inviable. Tu hijo o tu nieto, si nace, está destinado a una corta vida en coma. A partir de ahí, tienes entre dos y cuatro semanas para salvar lo que queda de la salud mental y física de la mujer que lo porta.

Primer paso: hay que buscar un médico especialista que no sea el que ha hecho el diagnóstico y que no tenga una lista de espera larga para que palpe, hurgue y pregunte otra vez y confirme que, efectivamente, el cansancio, las nauseas y las pataditas que tu mujer o tu hija siente día a día en su interior no se materializaran en un bebé y que su salud (física o mental) corre riesgo. Pero un sólo médico no es de fiar para los legisladores así que, una vez que sales de la clínica con la pena confirmada, vuelta a empezar. Más buscar, más exámenes, más preguntas, más esperanzas frustradas. Y la muerte creciendo en las entrañas de la mujer que amas.

Por fin (¿por fin?) tenéis los diagnósticos en la mano. Ahora estáis obligados a tomaros "al menos siete días" de reflexión.

El siguiente paso es buscar un ginecólogo que trabaje en una clínica independiente de las que ya habéis visitado (ya hemos dicho que los legisladores no creen a los galenos) y que tenga una lista de espera muy, muy corta para que haga la operación. Pero no sólo eso porque esta ley, a pesar de restringir el aborto a casos terapéuticos y violaciones, sigue permitiendo la objeción de conciencia. Es decir, con sólo pedirlo, cualquier médico puede librarse de la muy desagradable experiencia de ver una pequeña vida extinguirse entre sus dedos, sin detrimento para su salario o su carrera profesional. ¿Quién no firmaría eso?

En resumen, que si no tienes dinero y el embarazo se tuerce necesitas dos especialistas de la sanidad publica sin lista de espera que confirmen y reconfirmen que tu mujer, si no está muriendo, al menos quiere hacerlo y un médico de la seguridad social a quien no le importe practicar un aborto, que lo haga de inmediato y que no sea un carnicero. Mejor dejar para otro día como será la situación para las mujeres violadas.

La historia que he contado hoy esta basada en un caso real. Aun así, no es lo que más me preocupa. La continuación del anteproyecto se aprobó por 176 votos frente a 151. Si bien hay voces conservadoras de peso como Celia Villalobos o Alberto Núñez Feijoo que han expresado su desacuerdo con la actual redacción, no puedo evitar pensar que si las que aplauden en esta foto, con otro puñado, hubiesen “enfermado” durante la votación ahora no estaríamos donde estamos.

La foto no es de la votación de ayer (las de ayer son estas) pero las caras y los gestos son los mismos.

No es cuestión de ser pro-aborto o pro-vida. El anteproyecto de ley, de ser aprobado en su actual redacción, será una recarga innecesaria al sistema sanitario y una cruel agresión a la salud mental y física de muchas familias españolas.

Por último, una reflexión personal. ¿Qué tipo de sociedad acepta dificultar una posible acción culpable con la institucionalización de la tortura segura a inocentes? ¿Qué clase de persona apoya una ley que considera a su mujer, su hermana, su hija o ella misma y sus médicos asesinos hasta que se demuestre lo contrario?

16 comentarios:

  1. en este post hay tanta verdad que duele de solo pensar en las consecuencias de una ley absurda u.u

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    1. Por eso creo que hay conservadores que no la quieren. Cuanto más lo pienso, más creo que es una cortina de humo para distraer de otras cosas, aunque ya está bien de jugar con las leyes de aborción y educativas cada vez que quieren distraernos.

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  2. Madredediosbendita, que paren el mundo que me bajo. En días así casi me alegro de haberme exiliado en Europa del Este; desde aquí veo cómo mi país se hunde cada vez más en la mierda, con perdón.

    Estupendo resumen el tuyo, se lo he pasado a mi marido y al releerlo con él sentía escalofríos, ufff!

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    1. Lo triste es que "las dos Españas" están tan entretenidas discutiendo si aborto sí o aborto no que no parece importar cómo está escrita la ley en sí.

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  3. Dios, no lo había mirado desde ese punto de vista. Y que dolor se me ha quedado dentro.
    Miércoles, otro artículo bueno. Es verdad, no es cuestión de pro o contra. Es de sentido común.

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    1. Gracias. Me resulta de una hipocresía preocupante enarbolar la defensa "de los más débiles" para arramplar con la presunción de inocencia de una persona que ni siquiera llega a ser acusada. Y nos puede pasar a cualquiera.

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  4. Uffff, visto así ahora estoy incluso más preocupada que antes. Es triste vivir todo esto que estamos viviendo.

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    1. La preocupación no es mala, peor sería vivir en la inconsciencia.
      El español tiene una capacidad de aguante asombrosa.

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  5. No hay por donde cogerlo, ley regresiva y retrógrada, que no agrada a nadie, ni a los que la proponen siquiera y, aún menos, a la mayoría de españoles (y españolas en especial). Se trata de un compromiso que adoptó el PP con la Iglesia (parte de ella, la cúpula horrenda) y su derecha más derecha, para conservar y garantizar un puñado de votos (tampoco muchos en realidad) y que ni siquiera cumple ese cometido. somos (de nuevo) el hazmerreir de Europa. ¿y con este sistema político pseudodemocrático no podemos hacer nada!!!!!!!!! Indignadión es poco, muy poco.

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    1. Efectivamente, hasta el clero se asusta con esta ley. Según la revista médica The Lancet hoy, que dedica parte de su podcast semanal al tema, el 86% de la población española esté a favor del aborto libre y 75% de no cambiar la legislación. Es lo que me da esperanzas y me hace pensar que quieren proponerla, pero no necesariamente aprobarla.

      Por cierto, aquí va el podcast (en inglés, a partir del minuto 4:05)
      http://download.thelancet.com/flatcontentassets/audio/lancet-news/2014/14february.mp3

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  6. Desgraciadamente, he leído voces del Gobierno ensalzando lo bonito que es poder cuidar a tu criatura sabiendo que va a morir en breve. Que eso hace a padre y madre mejores personas.

    Si una pareja quiere continuar sabiendo que van a tener un hijo vivo sólo unas horas o días, que lo hagan, pero sea una decisión libre.

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    1. Pero no se trata de lo que se quiera. Ciertas malformaciones incrementan el riesgo para la madre si intenta parir o la pueden dejar estéril. No siempre es una cuestión de elección. De aprobarse el anteproyecto de ley, la situación que comento le puede pasar a cualquiera mujer en edad reproductiva que viva en España y no tenga dinero para irse, independientemente de sus ideas.

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  7. Creo que el tema de fondo es de conciencia.
    Respecto a este anteproyecto de ley en cuestión, también he oído que, en la práctica, lo que sucederá será que se recurrirá a clínicas sin las medidas y conocimientos sanitarios debidos.
    Por otra parte habrá que ver si se originará una diferenciación económica. Los que no puedan y los que no puedan salir al extranjero en busca de legislaciones distintas.

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    1. Lo que has oído de ir a clínicas sin medios apropiados lo ha denunciado la revista médica The Lancet en el enlace que le dí a José Núñez de Cela. Es una realidad en todos los países con normas semejantes.
      En cuanto a lo de salir a otro país, me asalta una duda: cuando alguien de la UE necesita un tratamiento y en su país no lo puede recibir a tiempo, su médico de cabecera puede pedir que el procedimiento se lleve a cabo en un centro de salud de otro país y los costes son reembolsados por la sanidad del país de residencia del paciente ¿Qué ocurriría si un médico alegase que con las listas de espera generadas por la nueva ley una mujer no puede ser atendida a tiempo?¿Pagaría nuestra sanidad el billete de avión (o el bus a Portugal/Francia)?

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  8. Y que parece que las mujeres que abortan lo hacen alegremente, a la primera de cambio, y que reinciden porque le cogen el gustirrinín. Y yo, sinceramente, esto no me lo creo. Alguna habrá, claro, porque tarados hay entre los que quieres abortar, y entre los que no.

    UN saludo

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    1. Y si una tarada quiere abortar, casi mejor no frenarla, por si acaso, a ver si va a parir a un Dexter Morgan...

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